3 PERFUMES: AFRODISIA, AJO Y ALBAHACA ¿PARA QUÉ SE UTILIZAN?

Voy a comenzar a explicar para que valen o para que se utilizan una serie de perfumes. Hay muchos aromas más, pero esta selección se basa en aquellos que podemos encontrar fácilmente, sea en tiendas especializadas o en plena naturaleza.
 

Afrodisia
 

El perfume de afrodisia era un potente invocador de la diosa Afrodita. Utilizaremos este aroma preferentemente para los asuntos amorosos en cualquiera de sus vertientes, ya sea para recuperar la motivación original de una relación existente, para potenciar que un nuevo amor llegue a nuestra vida o a fin de retener a una pareja que, con su actitud fría y distante, nos de signos evidentes de un creciente desinterés.
 

En un marco general, el aroma de afrodisia nos ayudará a equilibrar nuestra vida afectiva y, muy importante, a potenciar el vigor sexual.
 

Ajo

 

Las propiedades mágicas de esta planta son bien conocidas. Tanto por lo que representa como por el fuerte olor que desprende o por su forma, ha sido utilizado desde tiempos inmemoriales con el fin de proteger de las malas energías que puedan proceder del exterior del hogar, así como a los miembros de la familia, preservándolos psíquicamente de la agresión mental de terceras personas.

EL PODER DE LOS AROMAS MÁGICOS Y COMO APLICARLOS

En general, cuando se habla de aromas, se suele centrar la atención en las plantas que tienen flor. Sin embargo, la magia de las fragancias va mucho mas allá y sus creadores han buscado desde siempre la manera de obtener más perfumes.
 

Dentro de la variedad con flor, hay que advertir que no se usan todas por igual. Las principales son las rosas, sean blancas, rojas o amarillas, pero también los claveles, geranios, lirios, jazmines, anís, jacintos y otras como la mejorana o la mimosa.
 

Entre las especies que no poseen flor, debemos destacar la menta, cuyo olor puede captarse a varios metros de distancia; la hierba luisa; la culinaria albahaca, de profundo aroma y mejor sabor, pero a mas cortas distancias; y la ruda, muy usada en ceremonias ancestrales. Pero sería imperdonable concluir este brevísimo inventario olvidándonos de los arboles resinosos. Son muchos los que nos ofrecen sustancias aromáticas.
 

Las resinas, grasas, hojas, frutos y hasta parte de sus ramas, proporcionan un amplio espectro de perfumes. Podemos distinguir, entre muchos otros, las hojas secas de laurel, las de pino o roble, los frutos del árbol de la nuez moscada y el primigenio aroma de incienso. Destacaremos también otras fragancias, como la canela, o directamente obtenidas de la madera, como los aromas de pino, ciprés, sándalo, etc.
 

Todos estos aromas que hemos mencionado son perfectamente identificables en la naturaleza. No obstante, no debemos olvidar que, a lo largo de la historia mágica de los perfumes, se han empleado mezclas de todo tipo: combinaciones que alternaban las fragancias de las resinas, mezcladas con la sangre de algunos animales, su piel, pelo o incluso las sustancias grasas segregadas por sus glándulas sexuales. Una de estas sustancias animales es la del almizcle.

EL PALO SANTO O SANTA MADERA, SU HISTORIA Y SUS USOS PARA LIMPIAS

La madera del palo santo proviene del árbol Bursera Graveolens perteneciente a la familia Burseraceae, familia que también incluye mirra y el incienso (Boswellia carteri). De unos 10 metros de altura media, es un árbol con copa de hojas pequeñas bifoliadas, gran cantidad de ramas y frutos encapsulados color verde oscuro.
 

El palo santo, también llamado madera sagrada, se da en los bosques secos en gran parte de la América tropical de la costa pacífica de Sudamérica. De la familia de las Burseraceae provienen varios tipos de maderas que contienen resinas oleo-gomosas fragantes y que se queman como incienso debido a su olor etéreo. A pesar de que la madera se utiliza principalmente como incienso o para extraer aceites esenciales, también las hojas, frutas, corteza y raíces se cosechan y se utilizan. El árbol tiene la madera blanda y sólo tiene sus hojas verdes en la estación de las lluvias; crece preferentemente cerca de las riberas de los ríos, y es a menudo invadido por las hormigas de fuego brasileñas que protegen al árbol santo de los invasores.

Composición Química

El Palo Santo huele a madera dulce, y este olor proviene proviene de sus ingredientes aromáticos compuestos de limoneno, alfa-terpineol, carvona, Mentofurano, trans-Carveol, Pulegona, D-Germacreno, γ-Muuroleno y un 1,1%compuestos fenólicos, flavonoides, quinonas, antocianidinas y también varios agarofuranos no identificados que se encuentran en los árboles de edad.

Sostenibilidad

Sólo la madera caída o proveniente del árbol que ha muerto de manera natural produce el fuerte carácter resinoso y el olor dulce y leñoso por el que el Palo Santo es conocido. Dependiendo del tiempo que haya pasado desde la muerte del árbol, aumentará la fuerza de su aceite esencial ya que con el tiempo y mediante su proceso natural de descomposición, el árbol se va comprimiendo y segregando el aceite que lo impregna que va adquiriendo sus propiedades aromáticas y medicinales. Por lo tanto, el aceite de la más alta calidad y la madera más olorosa se obtiene de árboles que han caído muchos años atrás. Los árboles de Palo Santo pueden vivir por cerca de 80-90 años y para desarrollar sus características medicinales y olorosas, el árbol muerto tiene que envejecer cerca de 4 - 10 años.