UN CABELLO FINO Y ABUNDANTE
Aunque a primera vista nos parezca lo contrario, el champú no es un invento de nuestros días. Naturalmente con otros nombres ya los antiguos imperios egipcio y mesopotamico conocían métodos para cuidar y fortalecer los cabellos. Pero se trataba de fórmulas inspiradas en la naturaleza y son las que han sobrevivido a través de los siglos, enriqueciéndose con las experiencias de cada pueblo, hasta llegar incluso a ponerse de moda en los salones de alta peluquería de nuestras ciudades.
Aunque a primera vista nos parezca lo contrario, el champú no es un invento de nuestros días. Naturalmente con otros nombres ya los antiguos imperios egipcio y mesopotamico conocían métodos para cuidar y fortalecer los cabellos. Pero se trataba de fórmulas inspiradas en la naturaleza y son las que han sobrevivido a través de los siglos, enriqueciéndose con las experiencias de cada pueblo, hasta llegar incluso a ponerse de moda en los salones de alta peluquería de nuestras ciudades.
Te doy a continuación las recetas equivalentes a champú:
Para cabello delicado:
Hervir en un litro de agua 600 gramos de raíces de saponaria cortadas en pequeños trozos. Colar y lavar el pelo con este líquido.
Para cabello graso:
Hervir en un litro de agua y durante quince minutos, 50 gramos de corteza de Panamá o quilaya. Filtrar y lavar el pelo con este líquido. Aclarar con agua tibia.
Para cabello normal o seco:
Batir la clara y la yema de dos huevos junto con una cucharada sopera de aceite de oliva y tres cebollas grandes, cortadas en rodajas y dejarlas macerar durante cuatro días.
En medio litro de agua hervir una cucharada de corteza de encina muy picada. Cuando el agua quede reducida a la mitad, mezclarla con el alcohol de cebollas. Con las compresas empapadas en esta pócima friccionar el cuero cabelludo todas las mañanas.
Tinte natural:
Tinte natural: