El aroma del pachulí es embriagador, encantador, es un aroma oriental pesado que cautiva los sentidos. Lleva utilizándose miles de años y en la antigüedad su aceite era muy valioso, se dice que los primero comerciantes europeos intercambiaban una libra de pachulí por una libra de oro. Por darte otro dato, te diré, que en la tumba de Tutankamón se encontraron 10 galones de aceite de pachulí.
El nombre botánico del Pachulí es "Pogostemon cablin" y este representante exótico pertenece a la familia de las labiadas. Es un semiarbusto bajo, perennifolio, que procede de la India, las Filipinas y China. Se cultiva también en las Seychelles, Madagascar y Brasil.
El aceite esencial se obtiene por destilación de los tallos y las hojas secas, pero no en los lugares donde se cultiva, sino en el sur de Francia, donde está muy solicitado en la industria cosmética y para la fabricación de perfumes.
El aceite de pachulí se ha utilizado durante mucho tiempo en la medicina tradicional asiática, especialmente en Malasia, China y Japón. Se utiliza para tratar problemas de piel y cabello, como dermatitis, eczema, acné, piel seca agrietada y problemas de caspa y grasa en el cuero cabelludo .
Su rendimiento es del 2 %.
Su composición: 50 % de alcohol de pachulí aldehído benzoico, aldehído cinámico eugenol, azuleno y otros componentes.
La esencia tiene una consistencia viscosa y hay que mezclarla con alcohol para posteriores elaboraciones.
A diferencia de otros aceites que se pueden estropear o enranciar, el aceite de pachulí mejora con el paso del tiempo. Su color que normalmente es amarillo claro se convierte en color ámbar oscuro y su olor se vuelve más suave y rico.
A diferencia de otros aceites que se pueden estropear o enranciar, el aceite de pachulí mejora con el paso del tiempo. Su color que normalmente es amarillo claro se convierte en color ámbar oscuro y su olor se vuelve más suave y rico.