CHAKRAS: EJERCICIOS PRÁCTICOS PARA SENTIR SU ENERGÍA

 

Ser consciente de los chakras no es una tarea difícil, pero se requiere un mínimo desarrollo de la sensibilidad y alguna experiencia en materia de visualización para hacerlo con la debida solvencia.

 

En principio, puede ser muy útil incluso potenciar estas dos acciones mencionadas adiestrándose en la localización de los siete centros fundamentales: dado que sabemos dónde se encuentran, es sencillo reconocer qué tipo de sensaciones se producen cuando acercamos o retiramos la mano.

 

Los chakras sanos irradian energía, que podemos sentir. En cambio, si se trata de un chakra que necesita energizarse, debe detectarse cómo un pequeño flujo energía surge de tu mano hacia el chakra en cuestión.

 

Es asimismo recomendable que se experimente alternativamente con ambas manos para averiguar cuál es la más sensible y, por lo tanto, la más indicada para realizar cualquier ejercicio sensorial. También hay que tener en cuenta que las prácticas deben realizarse en pareja.

 

Sentir los chakras para localizarlos

 

• Tu pareja debería sentarse cómodamente en una silla, con la planta de los pies planas sobre el suelo, las manos sobre los muslos y los codos relajados.



• Ponte de pie a un lado y mantén la mano derecha separada de la parte frontal del cuerpo de tu pareja, casi a un ancho del antebrazo, con la palma opuesta a la base de la médula espinal.

 

• Lleva la palma hacia el cuerpo de tu pareja hasta que llegues a ser consciente de la sensación de flujo de energía en la región del chakra de la base. Deberías estar ligeramente separado del cuerpo de tu pareja, sin tocarlo de ninguna manera. No te preocupes si no puedes localizar el chakra la primera vez; ello llegará con la práctica. Pregunta a tu pareja si tus energías pueden sentirse en la región del chakra de la base. ¿Cómo se siente?

 

• Ahora, suavemente, alza la mano desde esta posición hasta que esté en línea con la zona sacra (opuesta a los huesos sacros), debajo del ombligo. Mira si puedes localizar la energía del chakra del sacro. Observa cualquier diferencia de sensación que registre entre un chakra y otro.

 

• Una vez más, lenta y suavemente alza tu mano hasta que la palma esté opuesta al chakra del plexo solar de tu pareja, encima del ombligo. ¿Qué sientes esta vez?

 

• Haz un descanso en este punto y habla con tu pareja de lo que ambos habéis percibido. Tu pareja debería permanecer sentada en la misma posición, preparada para continuar el ejercicio cuando ambos volváis a estar centrados.

 

• Mantén la palma a algunos centímetros de distancia del centro del pecho de tu pareja para sentir el corazón del chakra (Este no es el mismo lugar que el corazón físico).

 

• Suavemente, vuelve a desplazarte hasta la garganta, las cejas y, finalmente, hasta algunos centímetros por encima del chakra de la coronilla.

Ahora tomaros tiempo para hablar de vuestras conclusiones antes de cambiar los papeles, a fin de que ambos podáis compartir plenamente la experiencia completa de trabajar suavemente con cada sistema de energía etérea del otro.

 

Sentir los chakras desde detrás del cuerpo

 

¿En qué direcciones se enfrentan los chakras?

 

El siguiente ejercicio te ayudará a conocer la respuesta.
 

• Haz que tu pareja se siente de costado, de modo que la espalda quede libre.

• Esta vez mantén la palma en la espalda de tu pareja. Comienza en la parte opuesta del chakra de la base y mira si puedes sentir energía proyectándose en esa dirección. Como antes, desplázate de chakra en chakra lenta y suavemente (un movimiento precipitado en este nivel de concentración barrería energía de uno a otro, lo cual no es el propósito del ejercicio). Después de haber alcanzado el de la coronilla, hablad de vuestras conclusiones.

• Toma nota de cualquier impresión visual o de otra índole que cualquiera de vosotros pueda experimentar.

• Repite el ejercicio con tu pareja sentada en la posición normal. Toma nota de sus descubrimientos.